Los antiguos griegos, y hasta muy entrada la época clásica, tendieron a heroizar a personajes que supuestamente vivieron en una época pretérita, personajes que habitaron la Tierra en el tiempo que aún los hombres se mezclaban con los dioses.
Muchos de estos dioses que protagonizan los mitos, comienzan el relato siendo reyes en la Tierra, y que luego de algún suceso, principalmente la muerte, si su conducta lo amerita, llegan a personificar la idea de divinidad.
Desde pequeño siempre me ha llamado la atención, la transcendencia que adquiere una persona en la historia cuando la muerte le llega prematuramente, en la mayoría de los casos. Esto lo hemos visto en distintas materias ya sea en el deporte (Antonio Puerta), en el cine (James Dean), en la música (Ian Curtis lider de Joy Division o un tal Kurt Cobain) etc. No escribo esto para desprestigiar a ninguno de los ya mencionados, sino todo lo contrario.
Desde que el hombre es hombre ha tenido siempre a un gran enemigo, la muerte. Por todos los medios el ser humano intenta esquivar a la vieja parca, pero a veces cuando esta viene y nos alejamos del mundo terrenal seguimos vivos en el mismo, de otro modo distinto. De un modo mediante el cual nunca mas podremos morir, donde muere el hombre y nace el mito.
Claro que para ello tiene que suceder la catastrofe de la muerte. Ahora bien, ¿y si hoy día no hubiera muerto Kurt Cobain?, ¿y si tampoco lo hubiera hecho Antonio Puerta?
Nirvana es uno de mis grupos favoritos, pero creo que esto se debe a todo el mito que se creó con su muerte. Nirvana ,a mi parecer, justo antes de la muerte de Cobain era un grupo más popular que Alice In Chains o Pearl Jam pero que de no ser por el suicidio del lider del grupo de Aberdeen no alcancería la leyenda en la que se ha convertido y hoy lo veríamos como uno de los mejores grupos del grunge pero poco más.
En el caso de Puerta, de no ser por su repentina muerte, hoy día sólo lo conocerían unos cuantos locos por el fútbol, entre los que me incluyo.
Para terminar con estos desvaríos me iré citando a Francis Bacon: "He meditado a menudo sobre la muerte, y encuentro que es el menor de todos los males".